lunes, 6 de diciembre de 2010

Políticas de educación, ¿Revolución sostenible?

 

Con motivo de una presentación que realicé  a mis colegas sobre sistemas educativos e implementación de TIC’s. Es que en lo sabroso del debate surgió una pregunta fascinante.

¿Por qué nos esforzamos por importar modelos educativos exógenos, los que en la praxis han demostrado no ser del todo exitosos?

Entonces esta simple pero bombástica pregunta, me ha acompañado por algunos días, me preguntaba a mi mismo. “Si las personas que tienen a su cargo trazar el futuro de nuestra educación, habrán de considerar esta filosófica pregunta…”

Y la verdad es que apoyado por la investigación a las recientes reformas, intentos e intenciones de cambiar en algo el panorama educacional de nuestro país, es que he llegado a la simple conclusión de que al igual como en muchas áreas de quehacer político administrativo de Chile, podríamos aplicar la (inmortal y todo poderosa) frase “the chilean way”.

Pero en los actuales tiempos de globalización resulta más fácil aun mirar al mundo buscando las respuestas, que esta especie de Frankenstein educacional necesita. De esta forma es que sería bueno iniciar con el análisis de los principales y más exitosos países en materia educativa.

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Este documento corresponde al ranking de países en relación a los índices e indicadores  de la calidad de la educación a nivel mundial, lugar en el cual nuestro país se encuentra ubicado en el puesto 30. 

Análisis de nuestro sistema de acoplamiento suelto en contraste con el enfoque asiático. (La experiencia Coreana)

Hace algún tiempo atrás tuve la fortuna de poder asistir a un seminario en el cual se exponía y compartían los resultados de la experiencia coreana, en cuanto su sistema educativo. Sorprendido he visto que de alguna manera los pasos  suscritos por  su sistema educativo son similares a los que estamos dando aquí en Chile. (en cuanto al uso de las tecnologías de la información y comunicación). La diferencia sustancia es el alto enfoque o valoración que en Corea y en general todos los países asiáticos, se tiene por la educación y todos los procesos que de ella se desprenden.

De igual forma y más allá de todos los aportes foráneos es muy importante analizar y tener en cuenta que para poder pintar un cuadro que sea satisfactorio y hermoso no sólo son importantes los matices y colores. No debemos olvidar la principal herramienta con la cual se traspasa de la paleta a la tela, no podemos alienar el trabajo de todos y cada uno de los docentes, los cuales son el centro de cualquier reforma educativa. Hoy por hoy podemos contar con mayores y mejores herramientas o medios para llegar a nuestros estudiantes, pero verdaderamente lo que hace la diferencia es la MOTIVACIÓN que tenga cada profesor.

A modo de conclusión sobre la principal pregunta que motivó este artículo, considero que es tiempo de poder realizar una reforma educacional que esté a la altura de las exigencias de nuestros tiempos. Indudablemente son rescatables todos los esfuerzos por incorporar y asimilar experiencias exitosas desde otras latitudes, pero es tiempo de realizar una revisión amplia de los objetivos y metas que como  país tenemos para así dar vida a un sistema educativo que incorpore todos los factores necesarios para poder formar mejores ciudadanos y lógicamente una mejor y más justa sociedad.

Al finalizar este artículo primeramente quiero agradecer por la entrevista a  Mariana Aylwin, por su gentileza al responder tan claramente a mis preguntas. Luego a la fundación Chile por la invitación, a su director ejecutivo José Weinstein por todos los valorables esfuerzos que su organización realiza por la educación chilena.

1 comentario:

mister M dijo...

El tema da para largo, pero los esfuerzos en educación, más allá de todo, creo que resultan a muy largo plazo. Igualmente todos esperamos que todo esfuerzo o iniciativa de sus frutos.